domingo, 19 de julio de 2009

Un día como hoy...

Nunca son suficientes tropiezos, para aprender que no importa la forma, tamaño o el color de la piedra, es una piedra y puede hacernos caer ...
Por otro lado dijo Murphy (y no exactamente Eddy -el actor-, sino Edward -el científico-) en 1947-49, que todo lo que puede pasar, va a pasar y, aunque normalmente no tomamos en cuenta factores que ciertamente, de ser tomados en cuenta, afectarían seriamente, para bien o para mal nuestro aprendizaje, cuando los tomamos en cuenta, muchas veces nos hacemos "de la vista gorda" para creer que realmente no hay razón alguna para que debieran ser tomados en cuenta y preferimos auto-convencernos de que las cosas, por más obvias que sean, son de la manera completamente contraria (esto último, similar también a una de las leyes del citado Murphy)

Tropiezos, caídas, levantamientos y repeticiones ilimitadas de las tres anteriores, son factores constantes en nuestra vida, pero llega un momento, como hoy, que te cansas y me cansé, de seguir cayendo, un día en que no sabes si quieres más levantarte, a sabiendas de que en un futuro -mediato o inmediato- te verás de nuevo en el suelo, habrás vuelto a caer y deberás volver a levantarte, llega un día como hoy, que prefieres, sólo descansar...