De un concierto dado por Iraida Noriega y Guillermo Briseño en la UIA-P, logré extraer este fragmento de una canción cantada por el mismo Briseño:
La tristeza oprime el pecho,
la tristeza hace llorar cuando estás frente a los hechos que no puedes regresar,
el amor que se termina,
el amor que va a nacer,
la rosa que espina es la pena y mi placer,
pierde pedazos mi corazón ...
... uno suspira y salva la vida y dice perdón,
vuelvo a querer,
vuelvo a saber que amarse duele,
y vuelvo a querer,
y vuelvo a nacer,
y vuelvo a saber que amarse duele,
yo ya sabía que,
yo ya sabía que amarse duele,
y ya lo sabía y vuelvo a caer,
y vuelvo a nacer,
y uno suspira y jala la vida ...
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Otra, también de él...
Amor para hacerse joven en vez de envejecer,
amor para defenderse con el gesto de aprender,
amor por todas las cosas,
por la civilización,
por el pensamiento y el instinto salvador,
en la guerra, todo queda igual ...
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